Como se han obervado algunas dificultades a la hora de buscar el sujeto y el predicado de una
oración, vamos a repasarlo hoy con este ejercicio que os propongo.
Recordamos que lo
primero que tenemos que buscar
es el verbo en forma personal, y una
vez lo encontremos le preguntamos
¿quién? (o ¿quiénes?, si está en
plural) y lo que nos conteste será el
sujeto (que es la parte de la oración que nos indica quién realiza la
acción o de quién se dice algo). Otra
forma de averiguar el sujeto, como nos explicaba en el libro, es cambiar el número del verbo, es decir,
ponerlo en singular si estaba en plural y viceversa, y lo que veamos que tiene que cambiar para que la frase siga estando
correcta será el sujeto. Os pongo un
ejemplo:
Me han llamado mis primos
El verbo es “han llamado”, si le pregunto ¿quiénes?, la
respuesta será “mis primos”, luego ese será el sujeto. Si pongo el verbo en
singular (“ha llamado”, en lugar de “han llamado”), tendría que cambiar la oración
por esta otra: “Me ha llamado mi primo”; como vemos, lo que cambia es “mis
primos”, luego ese es el sujeto.
Una vez encontrado el
sujeto, el resto de la oración será el predicado.
En este ejercicio, aunque no lo pide, una vez encontréis el sujeto y el predicado
señaláis sus núcleos (el del
predicado siempre será el verbo, y el del sujeto un sustantivo o un pronombre
que lo sustituye).
Si el sujeto no
aparece, porque se sobrentiende, se llama sujeto elíptico, y se puede poner el pronombre que concuerda con la persona y
el número del verbo. Por ejemplo, “Ya he acabado”, el sujeto no aparece, es
elíptico, sería el pronombre “yo”.
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