Era una persona muy especial para mí, porque siempre estaba sonriendo. Siempre me hacía feliz y me decía que no tuviera miedo a nada, que fuera valiente, que fuera fuerte siempre en los momentos más difíciles de mi vida. Nunca se enfadaba conmigo.
Siempre hacía feliz a todo el mundo, era muy buena. Voy a echar mucho de menos los paseos con ella, sus curas cuando yo estaba enferma, sus charlas cuando estaba triste y me animaba, sus juegos y adivinanzas y muchas cosas más.
Te vamos a echar mucho de menos, GRACIAS POR AYUDARME SIEMPRE .
TE QUIERO MUCHO
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